Ciego (e-bog) af Coutino, Carlos
Coutino, Carlos (forfatter)

Ciego e-bog

40,46 DKK (inkl. moms 50,58 DKK)
Por tanto, si tu ojo derecho te fuere ocasin de caer, scalo, y chalo de ti Mateo 5:29Desde tiempos antiguos, la ceguera natural o inducida ha sido catalizador de profundas inquietudes provenientes de enormes escritores: Homero y Borges, por citar dos ejemplos. Ciego, un ejercicio de interioridad y exterioridad, viaje a travs de nuestras contradicciones, nos recuerda cmo el sabio Demcrito se arr...
E-bog 40,46 DKK
Forfattere Coutino, Carlos (forfatter)
Forlag Palibrio
Udgivet 2 august 2012
Længde 78 sider
Genrer Poetry
Sprog Spanish; Castilian
Format epub
Beskyttelse LCP
ISBN 9781463331382
Por tanto, si tu ojo derecho te fuere ocasin de caer, scalo, y chalo de ti Mateo 5:29Desde tiempos antiguos, la ceguera natural o inducida ha sido catalizador de profundas inquietudes provenientes de enormes escritores: Homero y Borges, por citar dos ejemplos. Ciego, un ejercicio de interioridad y exterioridad, viaje a travs de nuestras contradicciones, nos recuerda cmo el sabio Demcrito se arranc los ojos, obteniendo la lucidez pero pagando con la vista, suerte del dios Odn y el atormentado Edipo. Carlos, tan eclctico como uno de sus destinatarios, ilumina con versos, oscuros escondrijos, morada natural de los demonios, en busca de su propio exorcismo; como herencia de la tradicin demonaca, Lucifer, el portador de luz, etimolgicamente, ilumina. Ciego es entonces fosforescencia hecha poesa.Carlos convierte una de sus carencias en anttesis de la imposibilidad, transmuta un estado de indefensin en oportunidad de crecimiento. Sus poemas navegan entre el misticismo y la carnalidad, van de la hertica a la reivindicacin. La ceguera obliga a transitar en el presente, a no darse el lujo del descuido, a confiar poco a poco en los dems, pero sobre todo a confiar en uno mismo. Ciego es un texto donde la verdad propia se nos muestra sin sus velos, un libro donde esa verdad tambin es el no olvido.Podemos pensar que Homero no existi pero que a los griegos les gustaba imaginarlo ciego para insistir en el hecho de que la poesa es ante todo msica que lo visual puede existir o no existir en un poeta. Jorge Luis BorgesAlejandra Rodrguez M.